Bloque Popular Revolucionario BPR 30 de Julio 1975 Beligerantes

Bloque Popular Revolucionario BPR 30 de Julio 1975 Beligerantes

viernes, 6 de mayo de 2011

LA SALUD Y SEGURIDAD DE LOS TRABAJADORES EN NUESTRA ERA





LOS INTERESES DE LOS BURGUESES

Y


LOS INTERESES DEL PROLETARIADO


EL CONFLICTO DE INTERESES


ENTRE


PROLETARIADO TRABAJADORES


Y


LOS BURGUESES EXPLOTADORES


LOS GOBIERNOS


SEAN NEOLIBERALES O SOCIALDEMOCRATAS


SON CAPITALISTAS


LA UNICA ALTERNATIVA DEL PUEBLO

ES ESTA DEFINITIVAMENTE CON EL

BLOQUE POPULAR REVOLUCIONARIO


BPR DE EL SALVADOR


MOVIMIENTO SOCIAL AUTONOMO


DE EL SALVADOR


MOSA


"ESTAN APLICANDO LAS MISMAS MEDIDAS CRUELES


Y REPRESENTAN LOS MISMO INTERESES"



16 Congreso Sindical Mundial
6-10 Abril 2011, Atenas Grecia
Federación Sindical Mundial


Zan Moreas 40 str. 11745, Atenas Grecia
Tel: +30210 9214417, +30210 9236700, Fax: +30210 9214517
E-mails: info@wftucentral.org, gensec@wftucentral.org
Website:
www.wftucentral.org


DOCUMENTOS DEL CONGRESO
LA SALUD Y SEGURIDAD DE LOS TRABAJADORES
EN NUESTRA ERA

16 Congreso Sindical Mundial - Documentos sobre la salud y seguridad de los trabajadores en nuestra era.
Los gobiernos, sean neoliberales o socialdemócratas, están aplicando las mismas medidas crueles
y representan los mismos intereses. Nos están quitando varios logros y derechos fundamentales,
conquistados a través de luchas duras, con sangre y sacrificios, con el pretexto de “la salida
de la crisis”. Una crisis que generó la propia anarquía del capitalismo y las grandes ganancias
capitalistas. Una crisis profunda, que revela los límites históricos del capitalismo, un sistema que
está pudriéndose y genera a escala masiva el desempleo, la pobreza, la guerra y la represión.
En este contexto de infracción de todo derecho laboral, la FSM, a través de iniciativas
militantes, debe exponer las posiciones y los objetivos de lucha del movimiento sindical clasista
para la Salud y Seguridad en los lugares de trabajo.
Las posiciones de la FSM pueden y deben constituir la base para consolidar la unión en la
acción combativa del movimiento sindical clasista, a fin de que los trabajadores cesen de pagar,
con su propia vida, un tributo en aras de la rentabilidad del capital.
El contexto internacional
Los trabajadores en todos los países capitalistas están pagando un tributo de sangre muy caro,
en aras de la rentabilidad de la patronal. Según los datos de la O.I.T., cada año pierden la vida
aproximadamente 2,2 millones de personas en accidentes en el lugar de trabajo y a causa de
enfermedades profesionales, una cifra que demuestra un aumento del 10% en los índices, durante
los últimos años. Así mismo, aproximadamente 270 millones de trabajadores a nivel mundial han
sufrido algún accidente no mortal en el lugar del trabajo, mientras que 160 millones sufren de
enfermedades profesionales.
La O.I.T. estima que los casos de enfermedades profesionales oscilan aproximadamente
entre 80 y 120 millones. Dichas enfermedades se atribuyen a la exposición de los trabajadores
a varios agentes, que se ha comprobado que resultan dañinos. De estos agentes, al menos 50
son naturales, 100.000 son químicos y existen otros tipos, como los biológicos, los psicosociales y
los ergonómicos, todos agentes peligrosos en el entorno laboral. La proporción de la población
laboral expuesta a dichos riesgos excede el 40-50% del total de los trabajadores.
Es particularmente alarmante el riesgo a desarrollar un cáncer de origen profesional, que
a menudo excede el 5% del total de los casos de cáncer. Se han registrado por lo menos 350
agentes que está demostrado que son cancerígenos, a los cuales los trabajadores están expuestos
frecuentemente: el benceno, el asbesto (amianto), el cromo, las nitrosaminas, la radiación ionizante
etc.
- Con respecto al asbesto existe gran preocupación, y se estima que “el porcentaje de
enfermedades que produce será muy alto por varios años más”, especialmente en países fuera de
la UE, donde el uso y comercialización del asbesto no están prohibidos (Informe de la Comisión
Europea de Empleo y Asuntos Sociales- 0518-2008)
- Se producen grandes problemas a causa de los trastornos osteomusculares, relacionados
con los cambios ocurridos durante los últimos años en la organización y el contenido del trabajo.
En un informe de la O.I.T., se menciona específicamente que los porcentajes más altos de muertes
y casos de invalidez, debidos a enfermedades profesionales y accidentes laborales, aparecen en
países donde las multinacionales trasladan sus actividades en busca de mano de obra más barata
y con nula legislación laboral. No obstante, las cifras en los países de la UE no son mejores, en
absoluto. Cada año, millones de personas en la UE sufren lesiones o graves problemas de salud en
el lugar de trabajo.
- Cada 3,5 minutos alguien pierde la vida en la UE, a causa de factores que están relacionados
con el trabajo. Esto equivale a aproximadamente 167.000 muertes al año, bien como consecuencia
de accidentes mortales en el lugar de trabajo, que se estiman alrededor de 7.500 al año, o bien a
causa de enfermedades profesionales, que conducen a la muerte a 159.500 trabajadores al año.
- Cada 4,5 segundos algún trabajador en la UE está implicado en un accidente que provoca
la ausencia del trabajo, por más de 3 días. El número de accidentes que provocan ausencia del
trabajo superior a tres días es inmenso, con víctimas que superan los 7 millones de trabajadores al
año.
El informe de la Comisión de Empleo y Asuntos Sociales, “con respecto a la estrategia
comunitaria 2007-2012 para la Salud y Seguridad en el Trabajo”, aprobado en el Parlamento
Europeo, confirma los múltiples riesgos a los que se enfrentan millones de trabajadores en los
países de la UE.
Mientras la plana mayor de la UE presiona para el desmoronamiento de todo derecho
que se haya conservado y los gobiernos de los estados-miembro promueven –entre otros- la
prolongación de la vida laboral, el informe registra que, sólo en el año 2006, 167.000 trabajadores
han perdido la vida en la UE, ¡a causa de “accidentes” laborales o enfermedades relacionadas con
el trabajo! Se trata sólo de los datos oficiales, los cuales describen parte de la realidad, bajo la cual
viven y trabajan millones de empleados en la UE.
En la comunicación respectiva de la Comisión (bajo el título hipócrita “Mejorar la calidad y
productividad en el trabajo: Estrategia Comunitaria 2007-2012 de Salud y Seguridad en el trabajo”,
a la cual siguió el Informe de la Comisión y la votación del Parlamento Europeo) se estima que:
• Cada año, 300.000 trabajadores sufren una invalidez permanente de diversos grados, a
causa de su trabajo
• El 35% de los trabajadores en Europa “consideran que su trabajo encierra un riesgo para su
salud.”
• Un 28 % de los trabajadores europeos “manifiestan sufrir problemas de salud por causas no
relacionadas con un accidente y que se ven —o pueden verse— agravados por su empleo actual
o anterior”.
• Cada año, 350.000 trabajadores se ven obligados a cambiar de trabajo como consecuencia
de un “accidente”, mientras 15.000 quedan definitivamente excluidos del mercado laboral. Es decir,
quedan desempleados y se ven obligados a arreglárselas con subsidios de hambre, que son los
que conceden la mayoría de las veces los Seguros Sociales.
El informe señala, además, los altos niveles de acoso moral y de violencia en el trabajo,
especialmente en algunos sectores como en la salud, los servicios sociales y la educación.
Los datos dan prueba también de que el 24% de los trabajadores sufren de osfialgia y el 22% de
dolores musculares. 1/3 del total de ausencias del trabajo, por razones de salud de los trabajadores
y en algunas categorías el 50%, se debe a padecimientos osteomusculares.
La pérdida del oído a causa del ruido, es una de las enfermedades más frecuentes. El 25%
del total de los trabajadores europeos menciona que está trabajando bajo condiciones de ruido
elevado y el 12% considera que su trabajo le daña el oído.
Los agentes dañinos que amenazan a los trabajadores tienen consecuencias más
complicadas sobre las mujeres. Están relacionados directamente con la capacidad del organismo
femenino de concebir, de quedarse embarazada y dar a luz a un niño sano. Cuando dichas funciones
biológicas se perturban, los riesgos se multiplican.
Los datos del Informe reconocen en efecto que la estrategia de Lisboa y los objetivos de
refuerzo de la “competitividad” generan varios y complicados riesgos para la salud y seguridad
de los trabajadores. Como está señalado “[…] la salud de los ciudadanos viene determinada por
16o Congreso Sindical Mundial - Documentos sobre la salud y seguridad de los trabajadores en nuestra era 25
varios aspectos relacionados con el trabajo como el tipo de contrato, las condiciones laborales y
las posibilidades de empleo; destaca (La Comisión) que los cambios en las relaciones laborales y
el aumento de la precariedad laboral plantean también problemas de índole medioambiental,
psicológico y social que deben abordarse”.
En otra parte del informe, la Comisión expresa su preocupación frente a “la tasa
excesivamente alta de accidentes que sufren los trabajadores temporales o con contratos de corta
duración así como los trabajadores escasamente cualificados, ya que en algunos Estados miembros
asciende como mínimo al doble de la tasa correspondiente a los trabajadores permanentes”.
El Informe está saludando el objetivo de la Comisión de reducir la tasa global de los
“accidentes” en un 25% de aquí a 2012. La última intención de la UE es por supuesto minimizar
aquellos factores que puedan disminuir la productividad. Así tratan al trabajador: como una
máquina que debe funcionar bien, porque si se destroza dejará de producir más ganancias.
Además, la encuesta europea sobre las condiciones laborales indica que dichas condiciones
empeoran en Europa. Los problemas de salud debidos a condiciones laborales aumentan, puesto
que la intensificación del trabajo y la aplicación del trabajo flexible provocan el agravamiento
de las condiciones laborales, con desastrosas consecuencias para la salud y seguridad de los
trabajadores.
El capital está interesado sólo en el lucro
La agresión, que actualmente sufren los trabajadores, acentúa la explotación de la clase obrera.
En otras palabras, los recortes salariales, el empeoramiento de las condiciones laborales, el
derrocamiento de la seguridad social y de derechos sociales, sirven para aumentar las ganancias
de la plutocracia e intensificar el trabajo.
Es una ofensiva general, dentro del marco de la reestructuración capitalista, que para servir
los intereses del capital, aplasta los derechos, las necesidades y los sueños de los trabajadores y de
la juventud. El lucro capitalista se ha convertido en Dios…
Denominador común de esta política es la reducción del coste de la fuerza laboral, la
disminución de lo que denominan “coste no salarial”. Todo lo mencionado se está manifestando
con la exoneración, del Estado y de la patronal, de compromisos que tenían hasta hace poco en
la Seguridad Social, la salud, la asistencia social, los derechos de jubilación de los trabajadores.
También se pone de manifiesto con la imposición de nuevas cargas inaguantables sobre las espaldas
de las familias obreras y populares. El Fondo Monetario Internacional impone condiciones duras y
antilaborales, que intensifican el trabajo y provocan el aumento de los accidentes laborales.
Este ataque sistematizado, está tomando las dimensiones de un crimen anunciado, porque
la enajenación de las características del trabajo humano contribuye decisivamente en la creación
de un entorno laboral enfermizo, promotor de enfermedades profesionales y de accidentes
laborales. Todo esto influye de manera determinante en la renovación de la fuerza del trabajo.
La Vida y la Salud de los trabajadores consisten en temas primordiales para el movimiento
sindical clasista. La mejora de la Salud y Seguridad en los lugares de trabajo supone la mejora
de condiciones, medidas de seguridad, eliminación de los riesgos profesionales, restricción y
eliminación de los accidentes laborales y de las enfermedades profesionales, así como la mejora
de la calidad de vida de los trabajadores.
Todo esto tropieza con la ausencia total de medidas respectivas por parte de los gobiernos
y la patronal para la mejora de las condiciones laborales. Por supuesto, dicha postura no es
inintencionada, sino que obedece a una lógica que ve al trabajador como una pieza de recambio
en cada etapa de la producción, dentro del marco de la competitividad. Pone así en yuxtaposición
la vida del obrero con el coste económico de cualquier medida.
Los criterios con que se trata la protección de la salud de los trabajadores de todo
riesgo profesional, son diferentes para las fuerzas del capital y para la clase obrera, debido a las
contradicciones en los intereses sociales y de clase. La concepción capitalista sobre los problemas de
salud está enfocada a mantener la capacidad laboral del obrero para seguir produciendo plusvalía.
Por tanto, el concepto de salud se limita a cómo minimizar la ausencia del trabajo. En efecto, para
el capital la salud está considerada como un simple medio al servicio de los procedimientos y
necesidades de la producción, y no como un bien social y un derecho de la clase trabajadora, que
no obedece a las reglas de la ganancia.
Siguiendo esta lógica los Gobiernos dictan políticas para la salud y seguridad laboral con
arreglo al rendimiento de las empresas (es decir las ganancias de la patronal). Es así que se llevan
a cabo programas muy generales de “promoción de la salud”, lejos y fuera de los procesos de
evaluación y prevención de los riesgos laborales. Crean así confusión y fomentan la concepción
de responsabilidad personal o de responsabilidad mutua.
La condición de salud de los trabajadores no es un problema individual ni tampoco
responsabilidad personal. Está relacionada ante todo con el modo de producción y de
organización social. El sistema explotador actual, que tiene como objetivo principal y único el
aumento del rendimiento del capital, agrava todas las condiciones de renovación de la fuerza
del trabajo, incrementando la explotación y la destrucción de parte de las fuerzas productivas.
Las enfermedades profesionales, los accidentes laborales y el deterioro prematuro de la salud
de los trabajadores son manifestaciones de dicha explotación y de la adaptación violenta de las
aptitudes y potencialidades humanas a las necesidades de la producción.
En varios sectores de producción, la situación es literalmente inadmisible. Los ejemplos
son numerosos. Hay muchas industrias que cuentan con equipamiento viejo e instalaciones en
malas condiciones. En el sector servicios, tanto la introducción y el uso imprudente de nuevas
tecnologías como la adopción de nuevas formas de trabajo, producen consecuencias desastrosas
para la salud de los trabajadores. Un ejemplo más, en la agricultura, son el uso imprudente de
herbicidas y sustancias tóxicas y la multitud de accidentes que ocurren. En la construcción, la falta
de medidas de seguridad eficaces. En las minas y canteras, los obreros están marcados, casi en
su totalidad, por el trabajo pesado y peligroso. Los marinos realizan un trabajo que por su propia
naturaleza requiere la toma de medidas de protección especiales, y al contrario, esto constituye
motivo para una explotación con mayores facilidades por parte de los armadores. Y hay tantos
otros sectores de actividad, donde los accidentes laborales, las enfermedades profesionales, las
denominadas enfermedades degenerativas multifactoriales, así como los trastornos neurológicos
y psicológicos, tienen consecuencias inconmensurables sobre los propios trabajadores y sus
16o Congreso Sindical Mundial - Documentos sobre la salud y seguridad de los trabajadores en nuestra era 27
familias.
Entre los objetivos que promueve la patronal -dentro del marco del incremento de la
productividad a favor del gran capital- se encuentran la ampliación de la jornada laboral con
la suspensión de las 8 horas de trabajo diario, la suspensión de los Contratos Colectivos y la
generalización de los contratos individuales, así como la ampliación del trabajo suplementario con
remuneración reducida (guardias laborales inactivas), la liberalización de los despidos laborales,
el aumento de la edad de jubilación y el relacionar el sueldo con la productividad, que lleva a la
intensificación del trabajo. Todo esto agravará todavía más la situación, que ya está de por sí muy
cargada.
El empleo de menores y mujeres en puestos que agravan su salud, el incumplimiento
del horario legal de trabajo, la ocupación clandestina de trabajadores sin seguro social, la
explotación del desempleo, el terrorismo en los lugares de trabajo, alimentan la codicia para
aumentar el total del tiempo de trabajo y llevarlo a ritmos desenfrenados, que agotan físicamente
y psicológicamente los trabajadores. Dichas condiciones constituyen los factores primordiales
que causan enfermedades, y al mismo tiempo eliminan cualquier posibilidad existe para que los
propios trabajadores puedan reunirse e intervenir en los lugares de trabajo.
Mujeres trabajadoras
Los problemas de salud laboral que presentan las mujeres están relacionados con:
• Las condiciones laborales específicas en los sectores de trabajo con mayor concentración
femenina (comercio, salud, educación, servicios, bancos etc.)
• Las características de empleo (tasa alta de relaciones laborales flexibles, desempleo, escasa
cualificación etc.)
• Las particularidades del organismo femenino que afectan a su salud, de entre las que
destacan la reproducción y la necesidad de proteger la maternidad
Las actividades productivas en los sectores de mayor concentración femenina se
caracterizan por factores de riesgo dañinos, que provocan problemas de salud específicos, cuando
no se toman las medidas de protección adecuadas. Más concretamente y según las encuestas
europeas:
• Se estima que los trastornos osteomusculares ocupan el porcentaje más alto (54,4%) entre
los problemas de salud que presentan las mujeres. Esto se debe a la ocupación de las mujeres en
actividades en las que se ven expuestas a factores de riesgo, como son los movimientos repetitivos,
la manipulación de cargas pesadas, las posturas forzadas estáticas y de pie, el sedentarismo y el
diseño inadecuado del puesto de trabajo. Abundan los ejemplos en varias profesiones y sectores
como son la limpieza, el sector textil, las camareras, el comercio, el sector sanitario, el sector
administrativo con el uso de computadoras, las campesinas etc.
• Muy frecuentes son los casos de enfermedades infecciosas tipo hepatitis, tuberculosis,
rubéola (2,8% de los problemas de salud) en profesiones del sector sanitario, en guarderías, en
asilos de ancianos y en el sector ganadero.
• Entre las trabajadoras son muy frecuentes también las alteraciones en la piel, las alteraciones
respiratorias y las alergias, como ocurre con el caso del asma, debido al contacto e inhalación
de sustancias químicas (detergentes, desinfectantes), las alergias a causa de los tintes en las
peluquerías y el polvo en el sector textil, etc. Es más, el asma y varios tipos de alergias se relacionan
también directamente con el “síndrome del edificio enfermo”.
• El acoso sexual y la violencia son también frecuentes en lugares de trabajo como
restaurantes, bares y hoteles. Se estima que entre un 30% y un 50% de las trabajadoras en la UE
han sido víctimas de algún tipo de acoso sexual. La violencia física y moral es muy frecuente en
profesiones de sectores como el sanitario, los transportes y los bancos, mientras que el terrorismo
patronal está presente en todos los lugares de trabajo.
Menos frecuentes, pero no inexistentes, son algunas enfermedades profesionales como la
sordera, que constituye el 1% de los problemas de salud laborales en las mujeres que trabajan en
sectores como el textil, la industria alimentaria, etc.
Se estima que un porcentaje del 5-20% del total de las mujeres trabajadoras está expuesto
a agentes cancerígenos en los lugares de trabajo. Cabe también señalar que, muy recientemente,
se ha catalogado el trabajo nocturno como factor cancerígeno para las mujeres (cáncer de mama).
Además, son conocidos desde hace muchos años, los efectos negativos para el organismo humano
que conlleva el trabajo a turnos.
Como se ha mencionado, el cuerpo femenino tiene particularidades que no se toman en
cuenta en los lugares de trabajo. Muchos trastornos osteomusculares de las mujeres se deben al
diseño ergonómico de herramientas y equipamientos que utilizan las mujeres, pero que se han
diseñado en base al modelo corporal masculino.
Una de las mencionadas particularidades importantes del organismo femenino que debe
tomarse en cuenta aparte, compete a la reproductividad. En los lugares de trabajo existen factores
dañinos, que pueden afectar a la salud reproductiva tanto de mujeres como de hombres.
Sin embargo, además de la relación entre las actividades productivas y los riesgos que
entrañan para la salud y seguridad de las mujeres, es muy importante ser concientes de que dichos
riesgos aumentan a causa de las políticas antipopulares aplicadas y la reestructuración capitalista
que se está llevando a cabo en todos los continentes (relaciones laborales, seguro social, horario
laboral, comercialización de la salud y asistencia social). Todo esto afecta con mayor agudeza a las
mujeres, especialmente a las jóvenes, porque:
- Las mujeres sufren de mayor proporción de desempleo y precariedad laboral, lo que
constituye por si mismo un factor muy importante para la salud física y mental. La intensificación
del trabajo y la competitividad están directamente relacionados con el sentimiento de inseguridad
y de miedo.
- El régimen contractual de las mujeres empleadas es frecuentemente de contratos
temporales, de tiempo parcial, en agencias de trabajo etc. Consecuentemente, tienen mayores
posibilidades de sufrir un accidente laboral o una enfermedad profesional.
- Las mujeres trabajan con frecuencia en puestos con escasa cualificación, que cuentan
con peores condiciones laborales, riesgos incrementados y no ofrecen ninguna perspectiva de
desarrollo profesional.
- El retraso generalizado en la edad de jubilación y la igualación de las edades de jubilación
16o Congreso Sindical Mundial - Documentos sobre la salud y seguridad de los trabajadores en nuestra era 29
para ambos sexos, condena a las mujeres a más años de exposición a riesgos laborales sin tomar
en cuenta su doble cargo (adjudicación de las responsabilidades domésticas y familiares) y las
consecuencias para su salud física y mental
- Es obvio que las políticas de comercialización de los servicios de asistencia social, la
abolición de la jornada de 8 horas y la adaptación total del horario laboral a las necesidades de la
patronal, influyen negativamente en este sentido. Llevan a la desarticulación de la vida familiar,
con serios efectos en la salud.
- Finalmente, el trabajo sin seguro social, que tiene dimensiones exhaustivas entre las
mujeres, junto a la política de recortes en los servicios de salud por parte de los seguros sociales,
el refuerzo de la privatización de la salud y de su comercialización en general, dificulta cada vez
más la prevención, el diagnóstico, el tratamiento y el restablecimiento de los problemas de salud,
tanto de origen laboral como en general.
Más específicamente, las mujeres trabajadoras por cuenta propia, en tiendas, oficinas, empresas
familiares, en el sector agrícola, desarrollan también problemas de salud importantes. En la mayoría
de dichos trabajos las medidas de Salud y Seguridad son nulas, existe mucho estrés a causa del
horario inexistente, no tienen permisos de maternidad legislados etc. Más agudos todavía son
los problemas a los que se enfrentan las trabajadoras inmigrantes, que suelen trabajar sin seguro
social y sin ningún derecho.
Todos los problemas aludidos contribuyen a que el estrés aparezca como el segundo factor de
riesgo, después de los problemas osteomusculares, que influye en la salud de las mujeres. 20%
de las mujeres consideran el estrés, la ansiedad y la depresión como los problemas de salud más
importantes relacionados con el trabajo.
En cuanto a los riesgos para la seguridad e integridad física, estos se relacionan también con los
sectores de mayor concentración femenina.
El trabajo infantil
Según los datos oficiales tanto de UNICEF como de la O.I.T., 246 millones de niños menores de 18
años, están trabajando, en su mayoría en trabajos duros y peligrosos, tanto para su vida como para
su salud. De los 246 millones, 171 trabajan sobre todo en minas, en canteras, quebrando rocas,
excavando oro, diamantes y metales preciosos, corriendo el peligro o bien morir en un accidente
laboral, o de sufrir una lesión, o de convertirse en enfermos crónicos. De estos niños, 73 millones
son menores de 10 años.
La región a la cabeza es Asia-Pacífico, con 122,5 millones de niños trabajando y le sigue
África con 55 millones. En India 60 millones de niños que trabajan producen el 20% del PIB del
país. La gran pobreza y la explotación capitalista, la sed de las trasnacionales de grandes ganancias,
somete a los menores de edad al trabajo infantil, a la prostitución y a la explotación. Estos niños, en
vez de estar en aulas escolares educándose, están en los campos, en los semáforos de las calles, en
los mercados, en las minas de carbón, en las fábricas textiles y dentro de casas, haciendo trabajos
ilegales y peligrosos. En EE.UU. 70.000 niños trabajan en el sector agrícola, mientras que en Brazil
7 millones de niños se ven obligados a trabajar. En Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá, 2
millones de niños, entre 5 y 15 años de edad, trabajan en labores agrícolas. En las minas de Perú
trabajan 450.000 niños.
Los datos de la O.I.T. reflejan que cada año 22.000 niños mueren en accidentes laborales,
mientras que no existen datos y estadísticas de lesiones, casos de invalidez y enfermedades
laborales y psicosomáticas de los niños que trabajan. Es sabido que varias instituciones
internacionales han establecido el día internacional en contra del trabajo infantil. ¡Hasta existe un
día especial adicional sólo para África! En 1999 muchos países firmaron un pacto, acordando que
había que limitar el fenómeno del trabajo infantil. Sin embargo, todo se quedó en los papeles y
las buenas intenciones. La responsabilidad de todos estos organismos internacionales y de todos
los gobiernos capitalistas respecto al tema es muy grande, dado que bien permiten o bien toleran
esta situación inadmisible.
Por tanto, es obvio que el asunto de la protección de la salud y seguridad de las mujeres
y niños está directamente relacionado con la lucha política en contra del conjunto de aquellas
políticas que apoyan las ganancias y los intereses de los capitalistas, la reestructuración capitalista
que se está promocionando, así como las medidas en contra de los trabajadores para afrontar la
crisis económica y la preparación de su recuperación.
Lucha sindical y política
Consecuentemente, luchar en contra del conjunto de estas políticas, significa también una lucha
por la protección de la salud y seguridad de los trabajadores. Habrá que dar una batalla para la
toma de medidas de protección de los trabajadores en los lugares de trabajo y la mejora de las
condiciones de trabajo en cada lugar.
Sobre esta base habrá que resaltar que la clase obrera debe avanzar un paso más que la
mera negociación de las condiciones de su explotación, la negociación de las condiciones de
su vida. Habrá que acentuar, a través de este campo de lucha, la naturaleza explotadora de las
relaciones de producción capitalistas en su expresión más dura y la necesidad de derrocarlas.
Habrá que resaltar, que al fin y al cabo, mientras exista la propiedad particular en los medios de
producción será ésta la que definirá las condiciones de trabajo, las condiciones de contratación
para la clase obrera y los demás estratos populares.
La reforma del horario laboral, la abolición de la jornada fija, la prolongación de la jornada
laboral a 10 y hasta 12 horas y las consecuencias económicas y de otro índole de dichos cambios
en los trabajadores, con la agravación de su salud y la reducción de sus ingresos, son una realidad.
El movimiento sindical clasista debe tomar posición ante esta situación, porque:
• La salud no significa sólo la ausencia del trabajo, sino que es una situación de bienestar
físico, psíquico y social del ser humano
• La prolongación de la jornada laboral, la aceleración del ritmo de trabajo y el aumento de
la intensificación laboral, tienen consecuencias serias en la salud física y mental, pero también en
la activación social de los trabajadores.
• La exposición prolongada de los trabajadores a agentes dañinos para la salud, como los
naturales, los químicos, los psicosociales y los biológicos, llevará a la múltiple agravación de su
salud, a causa de la superación de los límites de exposición profesional, legalmente establecidos.
16o Congreso Sindical Mundial - Documentos sobre la salud y seguridad de los trabajadores en nuestra era 31
• La reducción “compensatoria” de las horas de trabajo, durante otros períodos, o la concesión
de algunos días libres adicionales y mucho menos cualquier recompensa salarial, no reducen en lo
más mínimo la agravación de la salud del trabajador, provocada por la jornada de 10 o 12 horas.
• Cualquier tipo de horario flexible está limitando la capacidad del trabajador para aprovechar
de tiempo libre. En este contexto, la regularidad del horario es condición imprescindible para la
vida social normal del trabajador, y por tanto está directamente relacionada con la condición de
su salud.
• Estudios científicos han demostrado que la frecuencia de accidentes laborales durante las
últimas horas de la jornada laboral de 8 horas es significadamente más alta y aumenta según se
prolonga la jornada.
Teniendo en cuenta todo lo aludido, el movimiento sindical clasista debe oponerse con tenacidad
a cada medida que pone en riesgo la salud de los trabajadores, a cada medida que facilita la
prolongación de la jornada laboral. Es más, con los cambios que se han llevado a cabo en el entorno
laboral y la introducción de nuevas tecnologías en los lugares de trabajo, están ya avanzadas las
condiciones para la reducción de la jornada laboral.
Con todo, se está llevando a cabo un crimen continuo a costa de los trabajadores. Crece así el abismo
que existe entre la realidad trágica que predomina en los lugares de trabajo y las necesidades
imperativas para la mejora del entorno laboral, para la protección eficaz de la vida, la integridad
física y la salud de los trabajadores.
Según estudios e investigaciones publicadas durante los últimos años, resulta que:
- El 30% de los casos de asma tiene origen profesional
- El 10% de los casos de cáncer se estiman también de origen profesional
- El porcentaje de sordera profesional supera el 90% en muchas categorías de trabajadores
- Se espera un aumento espectacular de las muertes a causa de la exposición profesional al
asbesto (amianto)
- Existen indicios considerables de que el desempleo está relacionado con el riesgo elevado
de la muerte a causa de enfermedades cardiovasculares, psiquiátricas y de neoplasias malignas. Es
también elevada la mortandad de los esposos/as e hijos/as de los desempleados.
Los representantes políticos de la clase rectora, en su intento de justificar el sistema y sus
responsabilidades inmensas, tratan de convencer a los trabajadores de que la situación que
predomina en los lugares de trabajo es una consecuencia inevitable, el precio necesario del
progreso, de la tecnología y del desarrollo industrial. Se trata de una distorsión consciente de la
verdad, que tiene como objetivo desorientar y moderar las reacciones de los trabajadores.
En la UE, una serie de factores revelan la necesidad de tomar y aplicar medidas para la salud y
seguridad en los lugares de trabajo. Algunos aspectos de esta situación negativa son:
- La política de reducción del coste de la fuerza laboral, intensificación del trabajo,
flexibilización del tiempo laboral, terrorismo en los lugares de trabajo, derrocamiento de los logros
laborales y del seguro social
- La posibilidad de las empresas a no amoldarse a los requisitos legislativos, sino a las “metas”
que ellas mismas establecen, en cuanto a su rendimiento en la salud y seguridad, a través de la
aplicación de “modelos” para la garantía de calidad, que rehúyen el control estatal respecto a la
responsabilidad patronal
- La entrega total del proyecto de protección de riesgos profesionales en los lugares de
trabajo en manos del capital privado, con la degradación y consecuentemente la abolición de la
infraestructura pública de Salud y Seguridad laboral, en su esencia
No se trata de vacíos y carencias casuales. La situación actual refleja la contribución substancial
del Estado al esfuerzo de la clase rectora en su contienda de competitividad, reduciendo el coste
de la fuerza laboral. Esta situación dramática debe alarmar y fortalecer el frente de lucha para la
protección de la salud, la integridad física y la vida de los trabajadores. Elemento constituyente de
este esfuerzo es la yuxtaposición y aislamiento de las directivas sindicales conformistas, que crean
ilusiones y tratan de identificar los intereses de la patronal con los intereses de los trabajadores, en
cuanto a la salud y seguridad laboral. Los trabajadores, unidos en el movimiento sindical clasista,
en la FSM, deben reivindicar de inmediato:
- La creación de Servicios Públicos de Salud y Seguridad
- La consolidación del horario laboral en 35horas semanales – 5 días por semana – 7 horas
por día, con el aumento sustancial de los salarios
- El cese del terrorismo patronal en los lugares de trabajo
- La prohibición del trabajo nocturno a mujeres embarazadas
- La prohibición del trabajo a menores de 18 años de edad
- La consolidación de los sistemas de Seguridad Social y de Salud íntegros, públicos y
gratuitos para todos
- El registro y aprovechamiento de todos los datos estadísticos
Sin embargo, el círculo de las muertes y las víctimas de la explotación capitalista seguirá, mientras
continúen las causas que lo alimentan. La mejora substancial del entorno laboral y de las
condiciones de trabajo, están vinculados inevitablemente con el cuestionamiento masivo de la
situación actual, con el cambio radical de la correlación de fuerzas a nivel sociopolítico a favor de
las fuerzas del trabajo, de la perspectiva socialista de las sociedades.
Hacemos un llamado a los afiliados y amigos de la FSM a poner en prioridad primordial los asuntos
de Salud y Seguridad, a formar sistemáticamente a los trabajadores, a sensibilizarlos sobre estos
temas. De tal manera que cada trabajador pueda regresar a su casa después de su jornada de
trabajo, sano y salvo.
16 Congreso Sindical Mundial - Documentos sobre la salud y seguridad de los trabajadores en nuestra era.


LOS VERDADEROS REVOLUCIONARIOS DE EL SALVADOR


LOS VERDADEROS SINDICALISTAS REVOLUCIONARIOS


POR EL DERECHO AL TRABAJO Y LA ORGANIZACION SOCIAL


LOS OBREROS EN PIE DE LUCHA


CON EL MOVIMIENTO SINDICAL CLASISTA


PROLETARIOS DE TODOS LOS PAISES UNIOS


CONTRA LOS ANTI-OBRERISTAS ANTI-LABORALES


DE LA DIRECCION Y DIRIGENTES DEL FMLN


CORRUPTOS Y OFICIALES DE LA BURGUESIA


CONTRA EL GOBIERNO DE AMPLIA PARTICIPACION -GAP-DEL FMLN NEOLIBERAL















No hay comentarios:

Publicar un comentario